1.LA DIMENSIÓN MORAL DEL SER HUMANO
La palabra moral se usa muy a menudo en el lenguaje cotidiano. Solemos decir que tenemos la moral alta o hablamos de la victoria moral del equipo. Al emplear la palabra con este sentido nos estamos refiriendo a un estado de ánimo caracterizado por la satisfacción o la ilusión.
Sin embargo, el significado de la moral es el de costumbre (en latín, mos-moris), modo de vivir o carácter de una persona y de la sociedad. El ser humano tiene una dimensión moral, gracias a la cual, somos capaces de diferenciar entre lo que hacemos y lo que deberíamos hacer, nosotros o los demás y, por ello, somos capaces de valorar estos actos como justos o injustos, buenos o malos, honestos o deshonestos, adecuados o inadecuados, correctos o incorrectos.
La conducta humana cuando es moral tiene las siguientes características:
-Se ajusta a unas normas y valores que regulan la relación entre las personas y que se consideran como buenas o malas.
-La persona tiene la libertad para elegir y decidir
-Al actuar con libertad somos responsables de nuestra conducta.
Los animales actúan por instinto, el ser humano actúa utilizando la razón y por eso es un ser moral, porque sabe lo que hace y puede elegir entre varias opciones de comportarse. Es capaz de analizar las ventajas o desventajas de sus acciones y es capaz, también, de anticipar las consecuencias de sus actos para sí mismo y para los demás. El ser humano es un ser moral y tiene también una dimensión social porque es ciudadano de la sociedad en la que se vive que establece normas, creencias, ideas, valores, prohibiciones y pautas de conducta, que caracterizan su forma de vida.
2.LA MORAL Y LA ÉTICA
Para convivir en sociedad es necesario regular las acciones concretas del ser humano a través de normas o códigos de conducta, que establezcan las obligaciones y las prohibiciones que sean justas, adecuadas y se fundamenten en el bien de las personas y el respeto a las mismas.
Se entiende por una conducta moral el conjunto de ideas o juicios que se tienen sobre lo que se considera bien y lo que se considera mal. Por ejemplo, tratar con respeto a otra persona es moralmente bueno, correcto y necesario en la convivencia humana. Humillar, ridiculizar o agredir a otro es una conducta moralmente negativa, inadecuada y mala. La moral nos dice qué es lo que es adecuado o es inadecuado hacer.
La moral dirige la conducta del ser humano a través de normas de comportamiento concretas. Estas normas sirven para regular las acciones de cada uno en la vida diaria en las relaciones interpersonales. Para poder vivir en sociedad con libertad es necesario que exista una moral que regule las relaciones entre sus miembros. La moral es, pues, el conjunto de normas que regulan nuestros actos.
La ética es un término que procede de la palabra êthos que se refiere a la manera de ser o carácter. El significado de la palabra ética es la reflexión sobre la moral, es decir, preguntarse ¿Por qué está bien o está mal esta conducta? ¿Por qué es válida y adecuada esta conducta y por qué no lo es esta otra?
La moral nos marca las pautas a seguir para que nuestra conducta sea buena, correcta y adecuada, y la ética reflexiona sobre el por qué de esas pautas o normas. Por ejemplo, tratar con educación a una persona es una conducta moralmente buena, y éticamente se explica porqué el ser humano tiene dignidad y debe ser respetado como tal. Tratar educadamente a otro es respetarle.
3. ¿QUIÉN DIRIGE MI VIDA?
Si alguien te preguntase por qué haces los deberes de clase, ¿qué le responderías? Tal vez le dirías que los haces porque te gusta aprender o porque crees que es tu obligación. Sin embargo, también podrías responder que los haces para quedar bien con los profesores o para que tus padres no te castiguen.
En el primer caso, tu conducta depende exclusivamente de ti; en el segundo, tu comportamiento depende de lo que hagan o piensen otras personas.
A veces actuamos por nuestros propios motivos, siguiendo lo que creemos que es mejor. Cuando hacemos esto estamos actuando con autonomía moral. Es decir, la autonomía moral es la capacidad de actuar de acuerdo con nuestras propias normas.
En otras ocasiones, nuestras acciones obedecen a motivos externos a nosotros: miedo al castigo, querer agradar a nuestros padres, caerle bien a una amiga, etc. Cuando actuamos así hablamos de heteronomía moral. La heteronomía moral consiste en obrar siguiendo normas ajenas a uno mismo.
La autonomía tiene mucho que ver con el concepto de persona.
Kant, pensador alemán del siglo XVIII, afirmaba que una persona es un ser autónomo capaz de establecer sus propias leyes.
Además, Kant decía que cada persona es un fin en sí mismo. Con esto quería decir que nunca debemos utilizar a las demás personas como si fueran objetos o instrumentos de los cuales nos servimos para nuestros propios fines.
4.EL DESARROLLO MORAL
Todas las personas maduran conforme se hacen adultas. También madura es nuestra moral. El desarrollo moral pasa por tres etapas en nuestra vida: el preconvencional, el convencional y el postconvencional. Cada uno de ellos incluye dos etapas. En total son seis las fases de nuestra madurez moral en las que evoluciona la capacidad para hacer razonamientos morales. Pasamos progresivamente de un nivel a otro conforme nos desarrollamos psicológicamente y somos capaces de comprender y razonar sobre nuestro comportamiento y el de los demás. Estas etapas son las mismas para todos los seres humanos y se dan en el mismo orden evolutivo.
Nivel preconvencional
Se refiere al período en el que se respetan las normas de conducta solamente atendiendo a las consecuencias de lo que hace una persona, por ejemplo, recibir premios o castigos por lo que hace. Este nivel está formado por dos estadios.
-Estadio 1. Se respetan las normas por obediencia y por el miedo al castigo.
No existe autonomía personal porque son los demás quienes ponen las normas, en este caso, la autoridad, los padres, las instituciones, etc. Este estadio es propio de la infancia. Sin embargo, algunas personas adultas pueden seguir este estadio cuando se comportan de este modo, como es el caso de los delincuentes que solamente el miedo a ser castigados puede obligarles a comportarse correctamente.
-Estadio 2. Favorecer los propios intereses.
Se entienden las normas si favorecen los propios intereses. La persona hace solamente aquello que le satisface y considera correcto que los demás también lo hagan. Las normas, en este caso, se cumplen por egoísmo, pensando en el bien de uno mismo. Este estadio también es propio de la infancia.
Nivel convencional
En este nivel las personas se identifican con su grupo y se considera bueno o malo todo aquello que así lo considera la sociedad.
-Estadio 3. Cumplir las expectativas de los demás.
El ser humano tiene la necesidad social de ser aceptado y valorado por los demás. Si hacemos lo que es adecuado cumplimos las expectativas de los otros. Cumplir nuestras promesas, ser responsables, devolver o agradecer un favor son ejemplos de conductas que cumplen lo que los demás esperan de nosotros. Este estadio es propio de la adolescencia.
-Estadio 4. Las normas sociales.
Se cumplen las normas sociales existentes que están dirigidas a conseguir el bien común. Se cumplen las normas por responsabilidad personal. Es el comienzo de la verdadera autonomía moral. Es un estadio que corresponde a la edad adulta.
Nivel postconvencional
En este nivel existe un conocimiento, una comprensión y una aceptación de los principios morales generales que inspiran las normas.
-Estadio 5. Derechos prioritarios.
Se considera este estadio como el de apertura al mundo: Todos los seres humanos tienen el derecho a la vida y a la libertad. Estos derechos son superiores y están por encima de cualquier institución, norma o convención. Las leyes legítimas son sólo aquellas que no deben lesionar dichos derechos. Si una ley o norma atenta contra la vida y la libertad se impone la obligación moral de no aceptarla y de enfrentarse a ella. En este estadio se considera la obligación de respetar el pacto social para cumplir y hacer cumplir las leyes en beneficio propio y de los demás, protegiendo los derechos de todos.
-Estadio 6. Principios éticos universales.
Los principios éticos universales siguen la siguiente regla válida para todo ser humano: hacer al otro lo que deseo para mí, o, no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti. Además, seguir estos principios exige tener el coraje de defender la dignidad humana, la justicia y la igualdad. Es el estado ético supremo, y a él se llega a través del uso de la razón. Algunos personajes como Ghandi vivieron profundamente este nivel moral.
5.ACTIVIDADES
-Si prometemos a un terrorista no revelar su paradero, ¿debemos cumplirlo?
-Si un rico nos lega su fortuna a cambio de no dársela a ninguna ONG, ¿tenemos que respetar su última voluntad?
-Si cumplimos las promesas que nos convienen, ¿destruimos el concepto mismo de promesa? ¿Puedo prometer algo que no sé si podré cumplir?
- ¿Eres capaz de poner algún ejemplo de autonomía moral? ¿Y de heteronomía?
- ¿En qué estadio del desarrollo moral crees que te encuentras? ¿Por qué?
- ¿Crees que tiene alguna ventaja que los demás decidan por ti? ¿Cuáles?
(AA.VV. Valores éticos. 1 eso. Editorial Ecir. Valencia. X. Martí Orriols- C. Prestel Alfonso. Val 1. Editorial Vicens Vives. Barcelona)